El turismo en torno a productos gastronómicos está adquiriendo una notoriedad sin precedentes. De hecho, España es uno de los mejores destinos para este tipo de turismo. No es de extrañar, puesto que en nuestro país tenemos la suerte de tener productos gastronómicos excepcionales.
Es lo que sucede, por ejemplo, con la trufa negra. La trufa se ha convertido en un producto exquisito, todo un manjar. Sin embargo, conviene recordar que hay 70 especies distintas de trufa, donde sobresale la trufa negra y donde España es el principal productor mundial, junto con Francia. En concreto, es la provincia de Teruel donde hay una mayor producción de esta joya de la alta cocina.
Gracias a ello, la trufa es un elemento que ha adquirido un gran interés entre propios y extraños, hasta el punto de tener la curiosidad sobre cómo se cultiva y cómo se recolecta. Tal es así que ha surgido una nueva tendencia turística muy singular: el trufiturismo.
Es decir, al igual que se realizan desde hace décadas actividades como el enoturimso o, más recientemente, el oleoturismo, se realizan un conjunto de actividades donde la trufa negra es la protagonista.
¿Qué es el Trufiturismo?
El trufiturismo es una actividad turística vinculada al 100% con la trufa. Es decir, son actividades que constituyen enseñanzas en lo que respecta al cultivo y la recolecta de la trufa. En España, giran alrededor de la trufa negra, en concreto.
A pesar de compararse con otras actividades, como las que hemos mencionado anteriormente, la realidad es que el trufiturismo se englobaría dentro del micoturismo, al ser la trufa un hongo, aun con unas propiedades muy concretas.
Estas experiencias buscan que el turista conozca mejor el producto, se ponga en la piel de un truficultor y llegue a comprender las propiedades organolépticas que hacen de la trufa ser un producto gastronómico tan codiciado.
Antes de seguir, vamos a hacer un pequeño inciso, ¿cómo es que se cultiva y luego hay que buscarla? En este aspecto, cabe recordar que la trufa es un hongo que surge en simbiosis con las raíces de determinados árboles, como las encinas, avellanos o robles. Una aparición que se puede originar de forma natural.
A diferencia de otros cultivos, aquí no se planta directamente una plantación o un huerto con el fruto, ¡no funciona así! Lo que hay que hacer con los cultivos de trufa es crear el ambiente perfecto para que haya una mayor aparición de trufas.
Para ello, se tienen que plantar árboles de los que pueda surgir la trufa negra. Tienen que ser árboles micorrizados, en un terreno con un suelo y unas condiciones climatológicas muy concretas.
Después de 5años en los que el árbol sea lo suficientemente maduro, se añaden esporas de trufa alrededor de las raíces del árbol y, de nuevo tener que esperar unos años, hasta que sea posible su recolecta, ¡es un arduo proceso!
El Trufiturismo y sus Actividades
Desde buscar las preciadas trufas a conocer más sobre su cultivo, así como realizar una prueba de cata o degustar platos donde el toque de la trufa se haga más que patente. Hay muchas maneras de practicar el trufiturismo.
Búsqueda y Extracción de la Trufa Negra
Una de las actividades más demandadas del trufiturismo es ir en la búsqueda de la trufa. Al estar en el subsuelo y tener que cavar para poder acceder a las mismas. Por ello, es necesario de un animal con un olfato más desarrollado que el de un ser humano.
Si bien es cierto que siempre se habla la figura del “cerdo trufero”, lo normal es que sean perros adiestrados los encargados de dar la voz de alarma para encontrarla. Así, en esta actividad se recorren los campos, acompañados por el truficultor y el objetivo de hallar este maravilloso hongo. Una vez nuestro acompañante dé el aviso, tocará cavar para extraer la trufa.
Cata de la Trufa
Vale, ya se ha recolectado la trufa, ahora es el turno de estudiarla a fondo. Otra de las actividades que se vinculan con el trufiturismo es la cata. Aquí, se examina con lupa la trufa. Se parte para conocer su estado de maduración, según el color de sus venaciones, se aprende cómo hay que conservarla adecuadamente sin que pierda su reconocido aroma.
Por supuesto, dentro de la cata no puede faltar en la cata de la trufa es en la de saber reconocer sus propiedades organolépticas. Sea siguiendo una ficha técnica o no, se aprende a tratar la trufa y a reconocer su aroma, sabor o la textura de la misma.
Degustación de Platos con Trufa
La trufa es un complemento, no es un alimento que se consuma directamente y en grandes cantidades, sin un alimento al que acompañar. Sin embargo, para comprender el poder que tiene, es necesario comprobar la diferencia de un plato en el que se ha añadido trufa de calidad.
Efectivamente, degustar un buen plato con trufa es la guinda del pastel de este tipo de actividades. Hay restaurantes y alojamientos en los que se ofrecen exclusivamente platos con este tipo de hongo, así como sugerencias de maridaje que encajan a la perfección con la trufa, ¡una experiencia gastronómica de lo más singular!
Alojamientos que ofrecen Actividades de Trufiturismo
El trufiturismo, debido al entorno en el que se realiza, se vincula perfectamente al turismo rural. Por eso, algunos alojamientos rurales organizan este tipo de actividades. ¿Te ha picado el gusanillo? A continuación, te mostramos algunos alojamientos que realizan actividades de trufiturismo.
Casas Chon Alto Tajo (Peralejos de las Truchas, Guadalajara)
El sudeste de Guadalajara es otras de las zonas donde hay campos en los que se cultivan trufas, especialmente en la zona que gira en torno al Alto Tajo. Aquí, también puedes practicar el trufiturismo. Uno de los impulsores de esta actividad en la zona es Casas Chon Alto Tajo, un conjunto de alojamientos rurales increíble, situado en Peralejos de las Truchas.
En total, tienes a tu disposición un total de 7 alojamientos rurales, con capacidades que van desde las 2 hasta las 7 personas y en los que las mascotas son bienvenidas. Son alojamientos acogedores, ideales para cualquier época del año, donde te sentirás como en casa. Lo mejor de todo es que los propietarios del negocio familiar también organizan salidas para buscar trufas.
La actividad consiste en la salida al campo con sus perros truferos, aprendiendo los fundamentos de la recolecta de la trufa silvestre y de cultivo, puesto que también recolectan trufa blanca. En el propio alojamiento se organizan talleres para la degustación de la trufa y aprender más sobre su limpieza y conservación.
La Casa de la Estación (Estación Mora, Teruel)
Como ya hemos comentado anteriormente, Teruel es la provincia donde se produce una mayor cantidad de trufa. Principalmente, se concentra en el sudeste, en la comarca de Gúdar-Javalambre. Aquí, te recomendamos la Casa de la Estación, ubicada en concreto en Estación Mora, en la localidad de Albentosa, junto a la Vía Verde de los Ojos Negros.
En este caso, hablamos de una casa dedicada a la agricultura del siglo XIX, reacondicionada como casa rural por habitaciones y que se encuentra pegada a una plantación trufera, manteniendo su esencia. En total ofrece 6 cómodas estancias, decoradas todas ellas con sumo encanto y personalidad, con un toque de lo más acogedor.
Como participantes activos de Fitruf, en la Casa de la Estación trabajan por y para la trufa, mostrando todas las virtudes de este exquisito manjar y pudiéndolo degustar en sus diferentes formas. Cuando es temporada, se organizan actividades como por ejemplo ir en búsqueda de la trufa acompañados, como no, de sabuesos buscadores de trufas. Así, podrás vivir de emocionante experiencia que es encontrar el oro negro.
Casa Juliana Agroturismo (Gabasa, Huesca)
En el este de la provincia de Huesca también existe una gran tradición alrededor del mundo de la trufa. Una zona, pegada a Cataluña, donde ha surgido un importante reconocimiento. En el cultivo de la trufa negra. En este caso, nos desplazamos a Gabasa, en la comarca de La Litera, donde está Casa Juliana Agroturismo.
Se trata de una casa espectacular, recientemente reformada, con capacidad para 8 personas. Una casa perfectamente decorada, donde estarás muy a gusto. Lo mejor de todo es que los popietarios del alojamiento ofrecen actividades como visitas a sus campos dealmendros, azafrán o su huerto ecológico.
Por supuesto, entre sus actividades está también la visita a una finca de cultivo de la trufa negra, donde poder recolectarla, acompañado de los perros truferos. También podrás disfrutar de un desayuno trufero y , si te has quedado con ganas de más, podrás adquirir trufa fresca para tus platos.
El Balcón del Tajuña (Valfermoso de Tajuña, Guadalajara)
Volvemos Guadalajara, esta vez en la comarca de La Alcarria, famosa por sus campos de lavanda y por su miel. Sin embargo, la trufa de La Alcarria está empezando a tener ahora un mayor reconocimiento. Si quieres disfrutar del trufiturismo y de una escapada tranquila en esta zona, nuestra recomendación es el Balcón del Tajuña.
Se trata de una casa para un total de 12 personas y que admite mascotas. Una casa de campo que cuenta con todas las comodidades necesarias para una estancia tranquila, para un grupo de amigos o de varias familias.
Desde el alojamiento se organizan actividades como la búsqueda de la ansiada trufa en una explotación. También se ofrece la posibilidad de realizar una degustación de este preciado hongo en un plato con huevos y acompañados de un buen vino.
Como puedes ver, el trufiturismo te permite adentrarte un poco más en el complejo mundo de la trufa. Si quieres aprender más sobre ella ,no lo dudes y planifica tu próxima escapada.
