Te proponemos una ruta llena de color. Una ruta cada vez más conocida en la que poder descubrir algunos de los pueblos más bonitos de Segovia. Y es que, efectivamente, la provincia castellanoleonesa está repleta de pueblos pintorescos que sirven de excusa para una interesante escapada rural, ¡y nunca mejor dicho!
La ruta nos lleva por la zona segoviana de la Sierra de Ayllón, donde predominan pueblos rojos, amarillos y negros, fruto de los minerales de la zona.
Javier Martín Espartosa (cc)
La cuarcita da un tono dorado y amarillo a pueblos de la zona como Alquité o Martín Muñoz de Ayllón. La arenisca ferruiginosa da ese toque rojizo a otras localidades como Villacorta o Madriguera.
Por último, se encuentran los pueblos negros, también propios del norte de Guadalajara, donde la pizarra se hace presente en poblaciones como Becerril, Serracín, El Muyo y El Negredo.
Mapa de los Pueblos de Colores del Sur de Segovia
A continuación, en el siguiente mapa, dispones de todos los pueblos que componen la ruta de colores de Segovia. Si buscas una escapada rural única, en Sensación puedes encontrar infinidad de alojamientos en Segovia, así como en la Sierra de Ayllón.
5 Pueblos de Colores que visitar en Segovia durante un Fin de Semana
Evidentemente, si buscas una escapada de fin de semana por la zona segoviana de la Sierra de Ayllón, puede que no solo quieras visitar estos pueblos y prefieres perderte por las calles de Ayllón o Riaza, además de rutas senderistas.
Por eso, desde Sensación Rural hemos preparado una selección de pueblos de colores que conocer. Sí, tienes de todos los colores. Tienes en esta selección pueblos de Segovia rojos, negros y amarillos.
Madriguera
Considerado el emblema de los pueblos rojos de Segovia, Madriguera destaca por sus casas de adobe y piedra rojiza, con balcones y tejados de madera que conservan la esencia rural.
Javier Martín Espartosa (cc)
Sus calles estrechas, la Fuente del Hierro y la Iglesia de San Pedro Apóstol muestran cómo la tradición y el paisaje se funden en un entorno único. Es un claro ejemplo de cómo la arquitectura popular ha perdurado gracias al uso de materiales autóctonos.
Martín Muñoz de Ayllón
Considerado uno de los llamados pueblos dorados o amarillos por el uso de la cuarcita en sus muros, Martín Muñoz de Ayllón sorprende por la combinación de colores en sus construcciones: el dorado de la piedra, el rojo de la arcilla y el negro de la pizarra en los tejados.
Felipe Cuenca Díaz (cc)
La Iglesia de San Martín de Tours y sus calles sin asfaltar conservan el encanto rural de una localidad que une en su paisaje las tres tonalidades más representativas de la Sierra de Ayllón.
Villacorta
A los pies de la Sierra de Ayllón, Villacorta luce sus casas de piedra rojiza en contraste con el verde de los prados que lo rodean. La Iglesia de Santa Catalina y la Ermita de San Roque son dos ejemplos de su arquitectura tradicional, donde la piedra, el barro y la madera se combinan en armonía.
David Daguerro (cc)
Sus vecinos conservan las fiestas y costumbres que han dado identidad al pueblo durante generaciones.
El Muyo
Conocido como uno de los pueblos negros de Segovia, El Muyo destaca por sus casas de pizarra negra que parecen mimetizarse con el paisaje. Aunque algunas viviendas están rehabilitadas y otras en ruinas, el conjunto mantiene el encanto de la arquitectura tradicional serrana.
Santiago López-Pastor (cc)
Curiosamente, su iglesia rompe con la estética negra al estar construida en arcilla roja, un detalle que refleja la mezcla de materiales de la zona.
Serracín
Serracín, situado en una ladera, ofrece un paisaje dominado por construcciones de pizarra negra, símbolo de la arquitectura popular de la Sierra de Ayllón. De su iglesia solo quedan ruinas, pero el uso de arcilla roja en su construcción contrasta con el resto del caserío.
Felipe Díaz Cuenca (cc)
Las minas cercanas de plata, carbón y pizarra hablan de su pasado minero, hoy silenciado por la despoblación.